Cuando llegué a la antigua ciudad de Pompeya sabía que entraba en otro tiempo. Ruinas que congelaban una época, sin tiempo para la decadencia o la reconstrucción. Puestos a decir la verdad no sabría recomendar qué ver en Pompeya. Yo siempre voy a ella con el buen humor con el que Zorba el Griego contemplaba su fracaso: «¿Alguna vez vio usted una catástrofe más magnífica?»
En consecuencia, más que monumentos u obras de arte, lo primero y más importante al llegar a Pompeya -Pompei como la llaman los aborígenes- es contemplar esta magnífica catástrofe provocada por el Vesuvio. No es la única, ni la más devastante, ni la última, pero nos ha dejado la maravillosa posibilidad de verla.
Horarios y entradas para visitar Pompeya
Hemos escrito una página que te puede ser muy útil a la hora de organizar tu visita: cómo llegar a Pompeya desde Roma.
Y antes de iniciar nuestro paseo para descubrir algunos de los lugares más importantes de la antigua ciudad de Pompeya, te indicamos información sobre horario y entradas.
Horario de verano (de abril a octubre): De 9.00 a 19.00 con última entrada a las 17.30.
Horario de invierno (de noviembre a marzo): De 9.00 a 17.00 con última entrada a las 15.30.
Días de cierre: 25 diciembre, 1 enero y 1 de mayo.
Las entradas cuestan 16 euros (10 si se entra después de las 15.30). Los ciudadanos de países de la UE entre 18 y 25 años pagan sólo 2 euros. La entrada es gratuita para los menores de 18 años.
Se pueden comprar online o en las taquillas de entrada en Porta Marina, Porta Anfiteatro y Piazza Esedra.
Para acceder será necesario el Green Pass.
Si quieres que nosotros nos encarguemos de toda la parte organizativa puedes reservar nuestro Tour a Pompeya en tren de alta velocidad. Para visitar Pompeya cómodamente en una jornada saliendo desde Roma.
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Qué ver en Pompeya Regio I: Ausencias.
El Huerto de los que Escapan (Orto dei Fuggiaschi) en la Insula 21. Un espacio en el que la ausencia de los que ya no están se ha petrificado. Momentos que han quedado congelados y que nosotros podemos ver. Podríamos ponernos en lugar de esos espacios congelados y transmitirles vida con un cierto estremecimiento a la hora de imaginar esos dramáticos momentos. Lo que hacemos en Pompeya es revivir la historia, con un suspiro de alivio que nos hace agradecer el aire límpido y hermoso que ahora nos rodea.
Teatro Grande (Regio VIII)
Caminando por via dell’Abbondanza, bonito nombre para una de las calles más importantes de esta rica ciudad de veraneo y comercio, llegamos al barrio del Teatro Grande. Una preciosa superficie semicircular que parece acogernos e invitarnos a escuchar. Este teatro nos convierte en espectadores, en los que esperan la llegada de mimos y actores, músicos y coros. Bajo las cenizas los ecos de sus voces y música siguen vivos como rescoldos. Quizás por eso Pink Floyd quiso despertarlos al invocarlos en otro precioso lugar de Pompeya, el Anfiteatro, con las notas de sus ‘Echoes’.
Terme Stabiane (Regio VII)
Las Termas son el momento del ocio por excelencia. Lugar de encuentro, de negocios. A la hora de escoger qué ver en Pompeya no podemos dejar de entrar en uno de los espacios en donde se desarrollaba la vida cotidiana de los pompeyanos. Además, poder contemplar sus espacios, la decoración, las piscinas, vestuarios y salas para juegos, nos hacen desear un tiempo en el que dedicarnos al relax y el cuidado de uno mismo.
Lupanar
Una forma de esclavitud, siendo esclavas las destinadas a la prostitución en esta casa, que aparecía como un normal comercio. Pinturas eróticas, indicaciones de precios, espacios y construcciones que nos hablan de las costumbres romanas y la forma de entender el papel de la mujer, de la sexualidad y las relaciones de pareja en la Antigua Roma.
Foro
Es siempre el lugar central, cruce de caminos, escaparate político y social, lugar de encuentro y desencuentro. Templos, casas, tiendas, rodean este hermoso espacio que se sigue enriqueciendo con expresiones contemporáneas. Un espacio que nos habla de la importancia y nos indica qué sitios ocupaban los intereses de los habitantes de la antigua Pompeya.
Casa de Fauno (Regio VI)
El esplendor de la República Romana convertido en magnífica residencia. Construida en el siglo II a. C. es un grandioso ejemplo de cómo los espacios y la decoración se unían en una armoniosa búsqueda de la elegancia. Amplitud que da alegría, colores y formas, materiales que desbordan los límites de sus paredes y parecen invitarnos a gastar y gastarnos por construir bien. Quizás así, en el patio, en donde se reúnan las lluvias, como si fuera un bosque dentro de casa, un fauno dance dando ligereza al tiempo.
Casa dei Vettii
Entramos en la casa de Aulo Vettio, rico comerciante, que nos acoge en un precioso patio rodeado de columnas. Aún podemos escuchar el sonido de los esclavos, el agua que corre, el fuego que arde ante los Lares. Escenas míticas en paisajes y arquitecturas maravillosos, colorados, amplios, abren sus muros para hacernos viajar con la imaginación. Un lugar muy especial cuando visites Pompeya para poder entrar en la vida cotidiana y en los sueños de quien la construyó.
Thermopolium
La ciudad está llena de estos antiguos ‘bares’ en los que tomarte algo. Su mostrador, los ambientes para mantener la comida caliente, las cocinas… Pocas casas de Pompeya tenían cocinas y mucha gente salía a cenar fuera, sobre todo entre las clases sociales más bajas. Uno de los monumentos que ver en Pompeya para disfrutar incluso de los aromas y recordar los menús que podríamos encontrar por sus calles en los primeros tiempos del Imperio Romano.
Villa dei Misteri
Ya en las afueras de la antigua ciudad nos acercamos a contemplar uno de los lugares más maravillosos de la antigua ciudad de Pompeya. Un lugar con un halo de misterio en el sentido más literal: en su decoración se describe el camino de un iniciado en los misterios de Dionisios – Baco. El amor, la fertilidad unidos al dolor son intentos para expresar con la belleza de sus colores, los misterios de la vida y de estos ritos que la representan. Un lugar lleno de encanto.
