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Escalinata de Plaza de España

La escalinata de Plaza de España es uno de los lugares más elegantes de Roma. Especial. Recuerdo la primera vez que me encontré con la mundialmente famosa escalera. Casualmente, un español enamorado de la ciudad. Paseaba por la via del Corso, miraba a cada desvío a mi derecha esperando encontrar un cartel que me indicara cómo llegar a Piazza di Spagna. No hizo falta, en una de las calles perpendiculares, al fondo, una escalera hacia el cielo paraba un poco antes en Trinità dei Monti.

Cómo nace la escalinata de Plaza de España

Este magnífico lugar fue construido precisamente para esta unión, aunque no tan celestial. La finalidad era conectar la Plaza de España con la iglesia de Trinità dei Monti.

El cardenal Mazarino (tan romano y que llegó a ser heredero del todo poderoso Richelieu) fue quien tuvo la idea de convertir una cuesta embarrada, serpenteante, oscura al anochecer, incómoda y que formaba un hiato con el resto de la ciudad en una hermosa escalinata. Fue él quien encargó al abad Elpidio Benedetti la urbanización del área de Trinità dei Monti, con la construcción de una escalinata que se habría pagado con la herencia de Etienne Gueffier, importante diplomático y gestor de los Establecimientos Franceses en Roma y Loreto, fallecido ese mismo año.

El proyecto de la escalinata incluía una estatua de Luis XIV de Bernini. Fue el mismísimo papa Alejandro VII quien se apresuró a impedir su ejecución. El proyecto no prosperó (reclamaciones y juicios por la herencia) y la construcción de la escalinata, modificada, tuvo que esperar hasta el pontificado de Clemente XI, con las obras de A. Specchi, F. de Sanctis y A. Gaulli. Ellos fueron los encargados de realizar el proyecto final ideando esta forma de «saltar» el obstáculo que suponía la colina. Una escalera que introduce, en forma solemne, el convento tan querido a los reyes franceses, curiosamente en la parte baja central ocupada por el ‘barrio español’.

En Plaza de España ya estaba finalizada la fuente de la Barcaccia, por lo que la escalinata empezaría con una maravilla de Roma y acabaría en otra. La parte alta se inspira en el cercano y antiguo puerto de Ripetta situado al final de la línea recta de via Condotti. En la parte baja, mientras tanto, la Barcaccia, nos indica que el fluir de la plaza y sus gentes, son otro río.

Moneda que conmemora la realización del Puerto de Ripetta, fuente de inspiración para la cercana escalinata de Piazza di Spagna.

Qué es. Descripción de la escalinata.

En total, 135 escalones de mármol y travertino forman la escalinata. Ésta fue inaugurada en el Jubileo del año 1725 y desde entonces se ha convertido en uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad. Pero también en un punto de encuentro para locales. Sentarse en los bellísimos escalones de tan preciosa escalera en buena compañía. Pararse y charlar observando la plaza o degustar un buen helado entre sus bellezas han sido de los planes preferidos por los romanos durante décadas. Todo esto hasta que, en 2019, se prohibió sentarse en la escalinata para proteger este elemento de la ciudad nombrado patrimonio de la humanidad por la Unesco.

Incluso durante años fue escenario de uno de los desfiles de moda más reconocidos y esperados a nivel internacional. Aunque, nuevamente como medida de conservación, acabaron por cancelarlo. Esto no significa que haya cedido nada de su atractivo. Casi una tentación, en la que cayó un joven saudita en el 2022 al bajar por la escalinata en plena noche con un Maserati. Fue detenido justo en el aeropuerto y podéis imaginaros la multa que tuvo que pagar por los daños.

Parada frente a la escalinata de Plaza de España durante nuestro tour privado Plazas de Roma.

Una escalera de película

La segunda vez que vi la escalinata de Plaza de España fue el mismo día que la primera. O, mejor dicho, la noche.

Al llegar a casa, lleno de emociones y pensamientos, decidí que era el momento de hacer algo que llevaba posponiendo mucho tiempo: ver la película de Vacaciones en Roma. Observar como Audrey Hepburn se enamoraba de Roma, de su gente y su comida me hizo verme a mí mismo durante mis primeros meses en la ciudad. Descubriendo cada rincón. Descubriendo la escalinata de Plaza de España.

Termino de escribir esta página y un amigo me llama contándome que ha visto una película. Un filme que quería aconsejarme sabiendo que estoy en Roma: Las chicas de Plaza de España (Le ragazze di Piazza di Spagna). ¡No creo en las coincidencias! Seguro que disfrutaré viendo como la escalinata es otro escenario más del cine y de nuestras vidas en Roma.

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