Como si fuera el jardín que rodea la Pirámide, el cementerio acatólico nos invita a pasear recordando la vida y obras de quienes han concluido sus días en la ciudad dejando su memoria, el espacio de una tumba, en Roma.
El Cementerio Acatólico, creado dentro de la antigua muralla Aureliana, en los llamados Prados del Pueblo de Roma, se encontraba alejado del centro habitado. De hecho, esta zona quedó destinada para sepultura de los extranjeros no católicos desde el s. XVIII. Inicialmente, con Clemente XI, fue concedida para enterrar a los ingleses de la corte Stuart de Jacobo III. De ahí que, también se llamara cementerio inglés. Un lugar ameno, que ha quedado como una isla de tranquilidad al lado del tráfico de Porta San Paolo.
Nos adentramos en él, guiados por las palabras del poeta Shelley que nos espera: «It might make one in love with death / to be buried in so sweet a place.” Podría hacer que uno se enamore de la muerte / quedarse enterrado en tan dulce lugar.
Visita el Cementerio Acatólico en Roma
Espacio para la memoria y lleno de belleza
De todas formas, acoge a personas de varias nacionalidades, incluyendo a algunos italianos. Un pequeño cementerio, escondido en uno de los lugares más bonitos de la ciudad, junto a la pirámide Cestia.
Asimismo, este cementerio es uno de los rincones que en Roma conservan más memorias. Nombres escritos en piedra o en el agua de la memoria: un contexto único, lleno de belleza.
Entre palabras y piedra podemos pasear acercándonos a la vida y obra de tantas personas, sobre todo literatos famosos que vivieron en Roma (Keats, Shelley, Gramsci, August von Goethe, H. C. Andersen, Juan Rodolfo Wilcock…).
Por ejemplo, en este enlance te proponemos un viaje recordando una de estas vidas. Se trata de una de tantas historias que surgen de las memorias tumbales en el Cementerio Acatólico de Roma.
Tumba de Keats en el cementerio acatólico de Roma
No podemos dejar de recordar el epitafio de la tumba de J. Keats: “This grave contains all that was mortal, of a YOUNG ENGLISH POET, who on his death bed, in the bitterness of his heart, at the malicious power of his enemies, desired these words to be engraven on his tombstone: Here lies one whose name was writ in water.”
“Este es ahora mi país, madre del barro,
un litoral inglés junto a los muros de Roma.
Y llueve sobre Keats, llueve lo que roe invulnerable la esperanza,
esa partícula de Dios que hace creer a un hombre en otro hombre,
esa tumba blanca donde honra un arpa como austero fruto la juventud de un joven.”
Un poco más allá, nos encontramos con versos de Shakespeare escritos en la tumba de P. B. Shelley: “Nothing of him that doth fade, but doth suffer a sea change, into something rich and strange.” Cambios, sin que nada se pierda. Él es realmente un mar. Quizás por ello, Gregory Corso, tras leer las obras de Shelley se siente conducido hacia la poesía, cambiando su vida. De hecho, tras su muerte, desea quedarse para siempre a su lado, desembocando continuamente en ese mar.
No te pierdas, además, nuestra visita en el cementerio monumental del Verano, cerca de la estación Tiburtina (parada metro B) y la basílica de San Lorenzo.
Horarios y Apertura
Dirección: Via Caio Cestio, 6, cerca de la Pirámide Cestia.
Líneas de autobuses: 3-75-23-60-83-95-280-30-175
Metro B – estación “Piramide”
La entrada se puede realizar hasta una media hora antes del horario de cierre.
Sendero que une el cementerio antiguo con la parte vieja (primera ampliación). Al fondo el ‘ángel del dolor’ del escultor Story, muy cerca de la tumba de Shelley junto a una de las torres de la murralla Aureliana de Roma.
“Ante mis ojos, los techos de Roma. No sé si debo tenderme en estas tierras. Debe de ser incómodo que nuestros pobres huesos sientan tantas civilizaciones, pinchándoles.»
(Memoria de la melancolía, María Teresa León)
Una visita guiada muy especial
Varios recorridos para descubrir lugares llenos de recuerdos, de historias que nos acercan a la historia de las artes, de la política, de la vida cotidiana. En medio de los monumentos fúnebres haremos revivir con la memoria sus vidas recordando sus obras. En fin, paseo para recordar y vivir.
Puedes contratar uno de nuestros tours privados con un servicio de guía especializado.
La oficina que se encarga de la gestión del cementerio solicita el pago de 3 euros/persona dedicados a la manutención del cementerio al tratarse de visitas guiadas.
La visita está disponible todos los días,
Duración: 2 horas
Escribe a tu Guía En Roma: [email protected] si quieres reservar o necesitas más información.
